EL SUEÑO DEL MONT BLANC
De vez en cuando hay que echar la vista atrás, para recordar un sueño hecho realidad. Fue en el Verano de 2.009, cuando nos decidimos partir hacia Chamonix, la cuna del alpinismo, para subir al Mont Blanc, la madre de todas las montañas de los Alpes, una gran montaña que me quitaba el sueño desde hacía años.
Después de 4 horas y media de Treking, llegamos por fin al campo base de Tete Rouse, en donde "plantamos" la tienda de campaña, y organizamos todos los chismes que llevábamos. Allí comimos para reponer fuerzas, y al poco tiempo, entró la borrasca que estaba prevista, eran las 4:00 de la tarde cuando comenzó a llover. Las previsiones del tiempo se van cumpliendo. Como no podíamos salir de la tienda de campaña, y ya que estábamos muy cansados, pues nos echamos a dormir. La tormenta duró hasta las 7:00 de la mañana del Sábado. Fueron 15 horas dentro de la tienda de campaña, sin poder salir ni a "mear".
La mañana era expléndida, con lo cual la íbamos disfrutando, haciendo fotos y videos, y sin prisas, pero a eso de las 11:45, empezaron a subir las nubes, y en 10 minutos, nos vimos envueltos en medio de una tormenta, con una niebla que no nos permitía ver mas allá de 3 metros.Las previsiones eran que la tormenta empezaría a eso de las 16:00, se adelantó mas de 4 horas. Estábamos muy cerca del refugio de Tete Rouse, así que nos dimos prisa, y en 15 - 20 minutos llegamos al refugio, en medio de una nevada, y una ventisca "bestial". Llegamos al refugio a eso de las 12:00 12:15, el cual estaba prácticamente vacío comparado como suele estar, ya que hay que reservar plaza con 2 meses de antelación, sólo había 30 personas, ya que como daban previsiones del tiempo "desastrosas", pues la gente se había ido. El plan original, era el de bajar de nuevo al campo base, pero como nos pilló la tormenta, pues nos tuvimos que quedar en el refugio. Estuvo nevando hasta las 9:30 de la noche, casi 10 horas seguidas sin parar de nevar, y con un viento horrible, menos mal que estábamos calentitos en las camas del refugio, en las que aprovechamos para dormir y descansar un buen rato. De la misma forma que entró la tormenta, "repentinamente" también desapareció, y quedó un anochecer sencillamente espectacular.
3.- Domingo 9 de Agosto, suena el despertador, nos levantamos y desayunamos lo más fuerte posible, ya que la comida que nos podíamos llevar era muy escasa, 2 barritas cada uno, y medio litro de agua por persona. Nos hicimos con el extremo de la cuerda, un arnés de cuerda con sus perneras, 3 anillos de cuerda al pecho, todo ello anudado a la cintura, y un mosquetón como anillo ventral cada uno, 15 metros de cuerda entre nosotros, con 5 nudos, para progresar por glaciares, por si hubiese alguna caída en grietas, y ya está, nada más.
FOTO DE CUMBRE DE CARLOS CASTILLO (Guía)
FOTO DE CUMBRE DE JOSE MIGUEL CORRALES
FOTO DE CUMBRE DE "LA CORDADA ANTIGUA"
Después de las fotos, empezamos el descenso hacia el refugio de Gouter, el cual se hizo mucho más duro de lo que preveíamos, ya que el cansancio acumulado era muy grande, y nos costó unas 4 horas llegar hasta allí, llegamos alrededor de las 14:30 hs. En el refugio descansamos un poco, y sobre todo, comimos y bebimos, ya que casi no lo habíamos hecho en todo el día, es uno de los síntomas de la altura... no te entra nada de comer, y lo poco que comes te sienta mal. Sin perder demasiado tiempo, a las 15:30 salimos hacia el campamento base, ya que anunciaban tormentas sobre las 16:00 - 16:30, y teníamos que llegar a la tienda antes de que empezara la tormenta, así que rápido pero seguro, a todo correr hacia abajo... hasta que, llegamos de nuevo a LA BOLERA, por delante nuestro, iban el grupo de 4 Españoles, que también habían hecho cima poco antes que nosotros, y los cuales la cruzaron de uno en uno, y, cuando estaba cruzando la única chica del grupo, se produjo un desprendimiento de piedras, que la pilló en medio del paso, y en lugar de echar a correr, para esquivar las piedras, el miedo la paralizó, y se quedó quieta, cayéndole piedras por todo su alrededor, y de nuevo con la puñetera suerte que ninguna la tocó. Después de ellos, nos tocaba a nosotros, mientras esperábamos, seguían cayendo piedras, más pequeñas, pero casi continuamente, teníamos que elegir el momento perfecto para cruzar, y así fue, en un segundo de calma, cruzamos a todo correr, primero uno, y luego el otro, y un poco más adelante, ya nos encontramos en el campo base, y en la tienda de campaña, justo en el momento que empezó a llover, eran las 17:00 de la tarde, y de nuevo nos tocaba "aguantar" otras 15 horas en la tienda de campaña, ya que hasta las 8:00 que nos levantamos casi no paro de llover. Recogimos el campamento, y de nuevo, cargados con un montón de kilos de comida y material, que no nos sirvió para nada, bajamos de nuevo al nido del águila para coger el tren y el telecabina que nos llevarían hasta Chamonix.
En fin, un bonito sueño que se cumplió tras muchos años soñando.
Gracias a mi compañero Josemi, de "la montaña es mi reino", que hizo un fabuloso montaje, podemos ver el vídeo completo de toda la expedición.